jueves, 24 de noviembre de 2011

IV

Porque a veces nuestros sueños fracasan, y sin embargo sabemos que, aunque lo que deseamos sea arena que se escapa de nuestras manos, siempre habrá alguien para devolvernos la sonrisa y escucharnos. Y siempre habrá tiempo para volver a intentarlo.

El regreso

Allá esperas consumida, abandonada la puericia
Un sueño roto entre tus manos y lágrimas en la mirada
Sonríes con timidez mientras el agua te acaricia.
El cabello tan revuelto, entre gotas que resbalan

¿Cuándo fue la última vez que dijiste que me querías?
Y tienes que contarme, necesito que me digas.
Como te ha ido en este viaje, ¿Cuántas penas y alegrías?
Simplemente cállate, mis brazos te necesitan.


Pero este no es lugar, mírate por un momento.
No paras de chorrear, vamos a un sitio bajo techo.
Escondida entre mis brazo, descansa de la lluvia
Sé lo mal que lo pasaste, me lo dice cada arruga.

Sé sincera, ¿Londres fue lo que pensabas?
La gran urbe, morada de tantas hadas.
Ahora debes reposar. Fallaste una vez
Pero lo volverás a intentar hasta vencer.

Y mañana todo cambiará, con el Sol entre las nubes.
Con el gallo al cantar, podrás volver a aquellas luces.
De momento solo mirar al pasado del que huyes.
Piensa en lo que pudiste lograr, el retorno será dulce.

No hay comentarios:

Publicar un comentario